Me distéis miedo
Estaba de escapada por tierras vascas, esas que tanto me llaman porque llevo parte suya en la sangre, volvia de tomar un ron a media tarde, y a lo lejos escuché vuestros gritos, vi como os acercábais en masa y sentí miedo.
Miedo de miraros a los ojos y demostraros que me ponéis enferma, que no os entiendo y me parece delictivo vuestro comportamiento.
Miedo de verme inmersa en uno de vuestros actos por pedir libertad, esa libertad que habéis denegado y aún denegáis a tanta gente con vuestras amenazas, vuestros asesinatos y secuestros.
Miedo de que por decidir visitar esa tierra que tanto me gusta, me confundieran con uno de vosotros y tuviera que echar a correr para no salir herida en el momento en el que a la policía cargó para detener un acto ilegal.
Miedo al ver los actos con los que apoyáis vuestros lemas, contenedores quemados, volvados en medio de las calles, coches rotos y algún que otro herido.
Miedo al miraros a la cara y ver que muchos de vosotros rezumabais tranquilidad, al ver vuestra convicción en los semblantes y darme cuenta de que os creéis merecedores de lo que pedís.
Y con el miedo llegó la pena, la pena por tanta gente que no comparte vuestras ideas y tiene que convivir con vosotros constantemente, esa gente que sentirá el mismo miedo que yo, pero que se tienen que tragar si quieren seguir viviendo en esa tierra que también es suya, esa tierra que muchos han tenido que abandonar para simplemente poder vivir.
Miedo de miraros a los ojos y demostraros que me ponéis enferma, que no os entiendo y me parece delictivo vuestro comportamiento.
Miedo de verme inmersa en uno de vuestros actos por pedir libertad, esa libertad que habéis denegado y aún denegáis a tanta gente con vuestras amenazas, vuestros asesinatos y secuestros.
Miedo de que por decidir visitar esa tierra que tanto me gusta, me confundieran con uno de vosotros y tuviera que echar a correr para no salir herida en el momento en el que a la policía cargó para detener un acto ilegal.
Miedo al ver los actos con los que apoyáis vuestros lemas, contenedores quemados, volvados en medio de las calles, coches rotos y algún que otro herido.
Miedo al miraros a la cara y ver que muchos de vosotros rezumabais tranquilidad, al ver vuestra convicción en los semblantes y darme cuenta de que os creéis merecedores de lo que pedís.
Y con el miedo llegó la pena, la pena por tanta gente que no comparte vuestras ideas y tiene que convivir con vosotros constantemente, esa gente que sentirá el mismo miedo que yo, pero que se tienen que tragar si quieren seguir viviendo en esa tierra que también es suya, esa tierra que muchos han tenido que abandonar para simplemente poder vivir.
Frase del dia: Lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia. (Mahatma Gandhi) |
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